"No basta con oír la música; es necesario verla."
Igor Stravinsky
INTRODUCCIÓN
Músico-Biográfica
Cuando Stravinsky habla de la necesidad de ver la música, obviamente no se refiere al mero acto visual, sensorial, que implique al órgano del sentido que es la vista, no, no es esto; este ver la música se refiere, antes bien, al hecho de representación intelectiva: no basta con oír sin ver, uno debe de sentir la música en base a las imágenes que ésta sea capaz de suscitar; si la música no es capaz de estimular imágenes mentales en quien la escuche estará faltando a uno de sus máximos objetivos como medio expresivo: el llegar allí donde las palabras -o incluso las mismas imágenes mudas- de ordinario, no llegan, salvo si son palabras encadenadas rítmicamente, es decir, poesía. La reflexión, la memoria, la evocación, la emoción, nada son sin imágenes; todas las percepciones sensoriales las traduce el cerebro humano a imágenes, y más cuanto más sensible se es; y no necesitan ser imágenes visuales, pero sí imágenes ideáticas que se corresponden a las imágenes sensitivas que los sentidos registran. Esto lo sabía muy bien Igor Stravinsky, por eso fue un excelente compositor de música escénica, de ballet o de Ópera. Y por eso su música, incluso la serialista y la diatónica es tan peculiar, tan colorista, tan imaginativa. Como él mismo decía: "soy un inventor de música, ante todo"; y tenía razón, sí, un inventor, pero de música ilustrada.
El compositor ruso dictaría una serie de seis conferencias en la Cátedra de Poética de la Universidad de Harvard durante el curso 1939-40; posteriormente serían recogidas en un librito con el título genérico de Poética Musical. Tenidas como "lecciones magistrales", en ellas hace un repaso clarividente y clarificador del fenómeno musical en su conjunto, desde lo más genérico -el acto creador, los elementos esenciales de la música, la composición, la tipología músical- hasta lo más concreto -las transformaciones de la música rusa o la ejecución-. Para entonces, siendo ya un reputado compositor e intérprete, y finalizada su etapa francesa (1920-1939), había buscado la seguridad de los Estados Unidos viendo la que se avecinaba en Europa. En este país -EEUU- se nacionalizaría, y acabaría afincado hasta su muerte; es la que se conoce como su etapa americana (1939-1971).
En su biografía hay que considerar, además, otras dos etapas: la etapa suiza (1914-1920), previa a la francesa; y la que le daría el mayor reconocimiento, la primera, la etapa rusa (1902-1914). El momento de su irrupción en el panorama musical europeo se debería a Serguéi Diáguilev, a la sazón director de la compañía Los Ballets Rusos (fundada en 1907) que triunfaba en aquel París efervescente de la Belle Époque, a principios del siglo XX. El promotor ruso encargó al joven compositor un ballet para su compañía al escuchar -y quedar impresionado- la fantasía Feu d'artifice, una de las primeras obras de Stravinsky, y en la que ya estaba impreso el sello de un estilo personal muy visual, colorista e innovador, un estilo que rompía con el dramatismo romántico y el drama lírico, dando un paso más allá de aquella primera reacción impresionista de un Debussy o un Ravel, y trayendo viento fresco a un panorama musical que ya daba síntomas de cansancio. Esta fructífera relación -Diáguilev/Stravinsky- marcaría la primera etapa, llamada rusa no solo por la residencia del compositor en San Petersburgo, sino, y más importante, por las características de sus composiciones, tanto formales como temáticas, pues busca inspiración en los cuentos y leyendas de su país, introduciendo no pocos elementos del folclore ruso. Así: El Pájaro de Fuego (1911), Petrushka (1911) y, sobre todo, La Consagración de la Primavera (1913), forman la trilogía que tanta fama le diera como músico revolucionario (algo que él no cesaba de desmentir, ya que no se consideraba en absoluto protagonista de ninguna revolución, y sí de una perspectiva musical original). No serían éstos las únicas obras que el compositor crearía para los Ballets Rusos de Diáguilev; hasta 1930, en que desaparecería la célebre compañía, Stravinsky no dejó de entregar nuevas propuestas: Le Rossignol (1914), Feu d'Artifice (1917), Le Chant du Rossignol (1920), Renard (1922), Mavra (1922), Les Noces (1923) y Apollon Musagète (1928). En su larga carrera seguiría componiendo tanto obras para ballet (probablemente le disputará a otro ruso, Tchaikovsky, sino la preeminencia en el repertorio clásico, sí la prodigalidad en las composiciones para danza), como óperas y otras obras de más difícil clasificación, a mitad de camino entre el oratorio y la representación escénica. The Flood (El Diluvio, 1962), sería su última ópera; después de ella ya solo compondría nueve obras: tres piezas corales, otras dos vocales , dos orquestales, una de cámara y otra para piano.
Moriría en New York, en 1971, y sería enterrado, por deseo expreso suyo, junto a su amigo y primer gran colaborador, Serguéi Diáguilev, en Venecia, en el cementerio de San Michele.
A parte de las cuatro etapas residenciales, se le reconocen tres etapas estilísticas, o conceptuales, referentes al tratamiento musical que dio a su trabajo: una primitiva, coincidente con su etapa rusa (innovadora, original, revolucionaria -a su pesar); otra neoclásica, en la que el autor vuelve a las fuentes, a Mozar y Bach (en reacción al subjetivismo romántico y al expresionismo germánico anteriores), pero siempre desde su originalísima perspectiva; y una tercera, dodecafónica o serialista, en la que, tras la muerte de Arnold Schoenberg, explora esta vía que no le reportaría mayor reconocimiento y a la que no aportaría la misma impronta que en sus dos etapas posteriores -aunque sí la impregnó de su personal estilo colorista, resultando así un serialismo "dulcificado" (cosa que hizo, por ejemplo, en el ballet Agon (1957), en donde se despliega una especie de mapa musical o compendio compositivo stravinskyano).
LA PROPUESTA
El Plan
A la vista está que Igor Stravinsky es un compositor especialmente mimado en este blog. No habrá más que retrotraerse a primeros de Abril de este año para comprobarlo. En esas fechas, aprovechando la llegada de la estación florida, tuve a bien dedicarle una, sino completa, sí exhaustiva serie sobre La Consagración de la Primavera: Consagración I y II (2-8/4/2011) y Poemas de la Consagración 1ª y 2ª Parte (5-10/4/2011).
En esta ocasión, y bajo el criterio enunciado en el título -Música para ver-, el foco se abre y lo que haré será realizar un recorrido por todas las obras para ballet, ópera y escena (oratorios) que Stravinsky realizara. Es decir: su música más visual (pues Stravinsky es, eminentemente, un compositor creador de imágenes musicales y la integridad de su obra está impregnada de ellas). Aquí se encontrarán, pues, todas esas obras juntas, por orden cronológico, lo que permitirá una perspectiva orientadora de cuál fuera su decurso profesional -y existencial-; algo capital para entender el universo creativo de uno de los compositores más originales e influyentes de la historia de la música.
El cuerpo multimedia lo formarán 21 obras: 15 composiciones para ballet y 6 para ópera/escena.
De las que he podido hallar versión en vídeo -que coinciden con las más representadas-, adjuntaré archivo vídeo-musical; de las que no, solo la versión audio, bien en su forma de suite, o en la orquestal original. Incluso en algún caso habrá más de una versión de la misma obra, cuando lo pida el interés histórico o musical, y ante la variada oferta disponible.
Cada obra irá presentada con una sucinta ficha técnica y una breve nota introductoria acerca de su tema y características (periodo estilístico, anecdotario, si lo hubiere, etc.).
Los textos que acompañarán a las diversas composiciones, pertenecientes a la Poética Musical, no son necesariamente alusivos a las mismas -aunque alguno lo pueda ser-, sino que seguirán la secuencia tal y como está desarrollada en la misma obra, desde la primera lección a la sexta y última. De este modo formará como una segunda pista o un contrapunto literario que, incardinado a la música y participando de su estructura nerviosa, pueda ser leído de forma independiente y, a la vez, consecuente con la música a la que acompaña, pues al fin y al cabo se trata de la filosofía que subyace en la génesis creativa del compositor.
Además, y dado que, al tratarse de obras para escena, es preciso realizar todo un trabajo artístico complementario -diseños de vestuario, escenarios, carteles, etc-, procuraré encabezar cada composición con imágenes correspondientes a esa labor artística complementaria original, ya que, en no pocas ocasiones, se trata igualmente de obras de arte (como en el caso de los Ballets Rusos) realizadas por reconocidos pintores y/o diseñadores (Nicolas Roerich, Leon Bakst, Picasso, Matisse, Alexandre Benois, Natalia Goncharova, entre otros).
Adelanto un a modo de Índice sobre contenidos y plan de los post:
OBRAS MUSICALES PRESENTADAS
(1) 1910. Ballet. El Pájaro de Fuego (EPF)
(2) 1911. Ballet. Petrushka (Pk)
(3) 1913. Ballet. La Consagración de la Primavera (LCP)
(4) 1914. Ópera. Le Rossignol (el Ruiseñor) (LR)
(5) 1916. Ballet. Renard (El Zorro) (R)
(6) 1918. Ballet. l'Histoire d'un soldat (Historia de un Soldado) (HS)
(7) 1920. Ballet. Pulcinella (Pl)
(8) 1922. Ópera. Mavra. (M)
(9) 1923. Ballet. Les Noces (Las Bodas) (LN)
(10) 1927. Ópera. OEdipus Rex (Edipo Rey) (OeR)
(11) 1925. Ballet. Le Chant du Rossignol (El Canto del Ruiseñor) (LCR)
(12) 1928. Ballet. Apollon Musagéte (Apolo Musageta) (AM)
(13) 1928. Ballet. Le Baiser de la Fée (El Beso del Hada) (LBF)
(14) 1934. Ópera. Persephone (Perséfone) (Pr)
(15) 1937. Ballet. Jeu de Cartes (Juego de Cartas) (JC)
(16) 1942. Ballet. Danses Concertantes (Danzas Concertantes) (DC)
(17) 1944. Ballet. Scénes de Ballet (Escenas de Ballet) (SB)
(18) 1947. Ballet. Orphée (Orfeo) (O)
(19) 1951. Ópera. The Rake's Progress (La Carrera del Libertino) (TRP)
(20) 1957. Ballet. Agon (A)
(21) 1962. Ópera. The Flood (El Diluvio) (TF)
POÉTICA MUSICAL
1ª Lección: Toma de Contacto
2ª Lección: Del Fenómeno Musical
3ª Lección: De la Composición Musical
4ª Lección: Tipología Musical
5ª Lección: Las Transformaciones de la Música Rusa
6ª Lección: De la Ejecución
DISTRIBUCIÓN DE LOS POSTS:
Post 1
Presentación
Nota biográfico-musical, Contenidos, Plan
Textos: 1ª Lección
Multimedia:
(Etapa Rusa)
(1) El Pájaro de Fuego
Post 2
Textos: 2ª Lección
Multimedia:
(Etapa Rusa)
(2) Pk,
(3) LCP,
(4) LR,
Post 3
Textos: 3ª Lección
Multimedia:
(Etapa Rusa-Neoclásica)
(5) R, (6) HS,
(7) Pl, (8) M, (9) LNPost 4
Textos: 3ª Lección
Multimedia:
(Etapa Neoclásica)
(10) Oe, (11) LCR, (12) AM, (13) LBF, (14) Pr, (15) JC,
Post 5
Textos: 4ª-6ª Lecciones
Multimedia:
(Etapa Neoclásica y Serialista)
(16) DC, (17) SB, (18) O, (19) TRP, (20) A, (21) TF
-o-
(1) EL PÁJARO DE FUEGO
(1910)
Está basado en un cuento del folclore ruso. Es un ballet en dos escenas, compuesto por Stravinsky en 1910, bajo encargo de Serguéi Diáguilev, para los Ballets Rusos. La coreografía fue debida a Michel Fokine y el diseño de vestuario y escenarios a Leon Pabst (en otra posterior versión sería rediseñada por Natalia Goncharova). Fue estrenada en la Ópera de París el 10 de Junio de 1910, siendo un éxito total, lo que provocó que Diáguilev encargara seguidamente al joven compositor (28 años) la creación de otros dos ballets (Petrushka y La Consagración de la Primavera).
Sinopsis: El Zhar-Ptitsa o Pájaro de Fuego es un ave legendaria que puede reportar a su captor tanto beneficio como maleficio, siempre dependiendo del trato que reciba por parte de éste.
El príncipe Iván Tsarevitch, que ha salido a cazar por la noche, se adentra sin saberlo en el jardín encantado del malvado Kastchei el Inmortal. De repente, se le aparece un pájaro de resplandeciente plumaje que revolotea entre los árboles. Iván lo persigue y consigue capturarlo, pero, conmovido por las súplicas que éste le dirige, le concede la libertad, obteniendo a cambio una de sus plumas. Poco después, el príncipe descubre a un grupo de trece princesas que juegan lanzándose manzanas de oro que arrancan de un árbol del jardín. El joven se les acerca y queda enseguida prendado de la princesa más hermosa (la bella Tsarevna), quien, a su vez, le corresponde. Al amanecer, los monstruos servidores de Kastchei hacen prisionero al joven Iván, al que el brujo quiere convertir en piedra. Cuando está a punto de conseguirlo, el príncipe llama en su ayuda al pájaro de fuego, agitando la pluma que éste le ha dado. El pájaro acude y hechiza al séquito del brujo. Sin embargo, pronto los monstruos se recobran y se lanzan a una danza infernal que los deja exhaustos. El pájaro interviene de nuevo y, tras dormir a Kastchei con un dulce berceuse, revela al príncipe que el malvado brujo tiene escondida su alma dentro de un huevo. Kastchei despierta, pero Iván se ha apoderado del huevo y lo estrella contra el suelo. El brujo y todo su séquito desaparecen para siempre. Con el despertar de los caballeros petrificados, el príncipe y la princesa celebran su boda. (Wikipedia)
Multimedia:
1. El Pájaro de Fuego: Ballet, versión del Ballet Kirov y la orquesta del Teatro Mariinsky, dirigida por Valery Gergiev. (Excelente. la más fiel al original, con diseño de Leon Pabst)
2. El Pájaro de Fuego: Ballet, versión del Royal Ballet y la Orquesta del Royal Opera House del Covent Garden, dirigida por John Carewe. (Muy buena. Con diseño de Natalia Gontcharova).
3. El Pájaro de Fuego: Ballet, versión de Stars of Russian Ballet y la Bolshoi State Academic Theatre Orchestra, dir. Artístico Andris Liepa. (La versión más cinematográfica, curiosa).
4. El Pájaro de Fuego: Suite para Orquesta (versión 1919). Lucerna Festival Orchestra, Director Claudio Abbado (Excelente y espectacular, muy Stravinskyana).
5. Firebird de Fantasía 2000. Producción de 1999, de la factoría Disney para conmemorar los 60 años de la original Fantasía (1940). En este caso se adapta la Suite del Pájaro de Fuego (1919), sustituyendo a la Consagración de la Primavera que ilustraba el fragmento de la creación de la Tierra en la película original. Muy Hayao Miyazaki, esta Fantasía 2000. Curiosísima.
6. Berceuse y Final del Pájaro de Fuego: fragemento final de la Suite, dirigida personalmente por el maestro Igor Stravinsky con 82 años (1964), espectacular de sonido e interpretación. Atentos a los gestos del genio, a su mirada, a los delicados o enérgicos movimientos de sus dedos y manos. Para no perderse.
Textos:
Poética musical
1ª Lección: Toma de contacto: fragmentos.
-o-
1. El Pájaro de Fuego: Ballet. Ballet Kirov
En efecto, no nos es posible llegar al conocimiento del fenómeno creador
independientemente de la forma que manifiesta su existencia.
...
2. El Pájaro de Fuego: Ballet. Royal Ballet
La ignorancia y la mala fe se enlazan por su raíz, y la segunda beneficia
sordamente las ventajas que extrae de la primera. No sé cuál es más odiosa.
De por sí , la ignorancia no es un crimen. Empieza a volverse sospechosa
cuando pretende ser sincera; porque la sinceridad, como decía Remy de Gourmont,
apenas constituye una explicación, nunca una excusa, y la mala fe no deja nunca
de asirse de la ignorancia como de una circunstancia atenuante.
...
3. El Pájaro de Fuego: Ballet. SR Ballet/Bolshoi SATO
Se me ha hecho revolucionario a pesar mío.
Ahora bien: los arrebatos revolucionarios nunca son enteramente espontáneos.
Hay gentes hábiles que fabrican revoluciones con premeditación...
Hay que precaverse contra los engaños de quienes
os atribuyen una intención que no es la vuestra.
...
4. El Pájaro de Fuego: Suite. Lucerna Festival Orchestra, Director Claudio Abbado
¿Para qué cargar el diccionario delas bellas artes con este término retumbante
[revolución] que designa, en su más habitual acepción, un estado de perturbación
y violencia, cuando hay tantas palabras más adecuadas para designar la originalidad?
...
5. Firebird de Fantasía 2000: Suite (1919)
El arte es constructivo por esencia. La revolución implica una ruptura del equilibrio.
Quien dice revolución dice caos provisional. Y el arte es lo contrario del caos.
...
6. Berceuse y Final del Pájaro de Fuego: Igor Stravinsky dirige.
Entendámonos: yo soy el primero en reconocer que la audacia es lo que mueve
a las más bellas y más grandes acciones [..] Apruebo la audacia; no le fijo,
de ningún modo, límites; pero tampoco hay límites para los errores de lo arbitrario.
Si queremos gozar plenamente de las conquistas de la audacia
debemos exigir, ante todo, su perfecta y clara luminosidad.
-0-
Apéndice
El Pájaro de fuego. Ballet completo versión orquestal.
Columbia Symphony Orchestra
Dirección: Igor Stravinsky
(¡¡¡Soberbia!!!)
-o-o-o-