Caravaggio: El Genio
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Aquí está el genio, pletórico de fuerza,
como un dios olímpico: Apolo y Baco,
capaz de lo más bello y lo más abyecto,
ajeno al mundo mortal de los humanos.
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Fuerza generadora y destructiva,
ímpetu colosal, furor titánico,
excelso andrógino de vida excesiva:
Michelangelo Merisi da Caravaggio.
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Reseña Biográfica
Michelangelo Merisi da Caravaggio. Nace en Caravaggio (o Milán, según recientes investigaciones), en 1571. Huérfano muy joven, por ello abandona su hogar para ir a Milán. Allí pasó dificultades, pero esto no le impidió el ir abriéndose paso en el campo de la pintura. Hacia 1589-1590 se traslada a Roma, aquí pasó verdaderas calamidades hasta que en 1594 entró en uno de los mejores talleres, el taller del Cavalier dArpino, el favorito de la curia papal. Su situación comenzó a mejorar considerablemente.
El taller estaba especializado en la pintura de bodegones. Se sabe que Caravaggio permaneció unos 8 meses con el Cavalier d'Arpino, pero luego montó su propio taller. Allí siguió realizando pintura profana de pequeño formato que vendía gracias a un marchante que tenía un negocio próximo a San Luis de los Franceses. El cardenal del Monte ve por primera vez las obras de Caravaggio, quedando sumamente impresionado. Como consecuencia, el cardenal se convierte en el protector de Caravaggio, produciéndose así un cambio trascendental en la carrera del pintor.
Entre 1595 y 1596 Caravaggio se traslada a vivir al palacio Madama, residencia del cardenal. A partir de entonces le lloverán los encargos, algunos de la talla de los demandados para decorar San Luis de los Franceses.
No todo fue un camino de rosas en la vida de Caravaggio. Pronto las envidias de otros pintores comienzan a acecharle. Esto unido a su carácter irascible hizo que tuviera que comparecer en varios procesos.
Un homicidio le obligó a huir a Génova, después volvería a Roma con el apoyo de sus protectores, pero tras un nuevo altercado, en el que mató a un hombre, tuvo que exiliarse de Roma, marchando a Nápoles (entonces pertenenciente a la Corona Epañola), primero, para pasar posteriormente a Malta, Sicilia, Palermo, otra vez de vuelta a Nápoles y, tras obtener el perdón papal, regresar a Roma por la costa, donde enfermaría de fiebres, a los 37 años, muriendo, en 1610, en Porto Ercole.
Características de su Pintura
De Caravaggio se ha dicho que fue un revolucionario tanto por su vida turbulenta como por su pintura, en la que planteó una oposición consciente al Renacimiento y al manierismo. Siempre buscó, ante todo, la intensidad efectista a través de vehementes contrastes de claroscuro que esculpen las figuras y los objetos, y por medio de una presencia física de vigor incomparable. Al evitar cualquier vestigio de idealización y hacer del realismo su bandera, pretendió ante todo que ninguna de sus obras dejara indiferente al espectador.
Principal figura de la pintura italiana de su tiempo (con él se naugura el Barroco), aprendió el arte pictórico de un maestro de segunda fila, Simone Peterzano, y sobre todo a partir del estudio de las obras de algunos artistas venecianos. Está influido por la obra de Giorgione y Tiziano (al que imita en sus primeras obras, según algunos).
Desde el principio de su estancia romana rechazó la característica belleza ideal del Renacimiento y muchas de las normas pictóricas refundidas en el Tratado Lomazzo, basado en convenciones estrictas (decoro y moto) que encorsetaban la pintura de su tiempo, eligiendo el camino de la verdad y el realismo, realizando sus obras mediante copias directas del natural, sin ningún tipo de preparación previa ( en esto su genio sería comparable al del Mozart músico, quien tampoco hacía borradores ni enmiendas en sus partituras).
Así, donde el decoro del canon pedía tratar la figura humana con respeto y en orden a la dignidad que tuviera si era un personaje bíblico o religioso -es decir, idealización- Caravaggio elegía sus modelos entre la gente de la calle: mendigos, mozalbetes, prostitutas,... eran quienes encarnarían las figuras de los santos, María, El Bautista, o Cupido.
En cuanto al moto, Caravaggio, dotó a sus personajes de un carácter muy marcado en que la psicología se acentuaba con las posiciones de los cuerpos, los gestos y las perspectivas; nada de idealizaciones, realismo exacerbado y, en ocasiones, casi grotesco.
De sus primeras obras, obras de juventud, se destila un tinte homoerótico en el que la representación humana esta jecutada en base al andrógino, esa especie de ser ambivalente femenino-masculino, de ambigüedad sexual, difícil de delimitar. Se sabe de la homosexualidad de Caravaggio, pero no se descarta que fuera un especimen más de su obra, un andrógino ambivalente con un carácter endiablado que le llevaría a la muerte, no sin antes haber dejado una de las obras más influyentes en la historia de la pintura (comparable a la de un Miguel Angel).
Se podrían establecer cuatro épocas en la obra del pintor:
1ª Una primera época de aprendizaje y búsqueda del estilo propio; desde 1585 a 1592, época de Milán. Allí estudiará la Última Cena de Leonardo da Vinci, y los estilos de Giorgione y de Tiziano, y trabajará en el taller de Peterzano (a la sazón, alumno de Tiziano).
2ª Época de afianzamiento de un estilo propio, de 1592 a 1600. Primeros cuadros, no religiosos, costumbristas, mitológicos; expresión homoerótica en la figura humana, tanto masculina -sobre todo-, como femenina -menos-. Bodegones, naturalezas muertas, a las que da la categoría de temas pictóricos en sí mismas. Comienza a extremar el claroscuro para dar volumen y expresión a las figuras. Abundan las tonalidades coloristas fuertes (rojos, verdes, azules) sabiamente distribuidas entre los ocres y las tierras.
3ª Época de madurez y esplendor, ya en Roma, entre 1600 y 1606, aquí s consagra como gran pintor, reputado, admirado y vilipendiado, tanto por su carácter tempestuoso como por su estilo revolucionario. Es en esta época cuando realiza casi todas sus obras maestras. Fijación y potenciación del claro-oscuro, conceptismo de los cuadros (introducción en la temática de la obra de múltiples significados) y un verismo expresivo hasta entonces desconocido. Sus obras son excepcionalemte valoradas tanto en el mundo del arte como en el de los mecenas -que se lo disputan; lo cuadros rechazados por la curia católica -por su irreverentismo representativo- son inmediatamente adquiridos por las cortes europeas.
4ª Época de exilio, 1606-1610, los cuadros se vuelven más oscuros, se acentúa el claroscuro y los ambientes de penumbra hasta el extremo de crear un nuevo estilo denominado Tenebrismo: a veces la acción del cuadro está delimitada por un haz de luz diagonal que incide sobre las partes de los personajes que que mejor expresan y resumen la temática, sumergiéndose el resto en la oscuridad. Una suerte de simplicidad complicada que solo un gran genio de la pintura en el dominio de la luz es capaz de llevar a cabo. Esta época durará hasta su muerte; semejándose - si lejanamente en lo artístico, muy cercano en lo psicológico- a las pinturas negras de Goya.
Influencia de su obra
La instalación del conjunto de pinturas referidas a San Mateo en la Capilla Contarelli tuvo un inmediato impacto entre los jóvenes artistas romanos, y el caravaggismo se convirtió en la moda para los incipientes artistas. Entre los primeros «caravaggistas» se encontraban Giovanni Baglione (aunque su etapa «caravaggista» duró poco) y Orazio Gentileschi. A pesar de la barrera generacional, Gentileschi fue quien mejor se adaptó al estilo de su maestro y logró hacer una carrera artística propia, que le llevó a la corte de Carlos I de Inglaterra. Su hija Artemisia Gentileschi estuvo cerca de Caravaggio y logró crear su propio estilo, con mucha influencia de éste. Otros pintores como Annibale Carracci, adaptaron el caravaggismo, que mezclaba elementos del Alto Renacimiento y del realismo lombardo. Este estilo terminó triunfando.
La estancia de Caravaggio en Nápoles produjo una escuela notable para el caravaggismo napolitano, que incluyó a Battistello Caracciolo y Carlo Sellitto. El caravaggismo tuvo su final durante la terrible plaga de 1656, pero las conexiones con España – al ser Nápoles posesiones española, durante Felipe IV – fue básica para el nacimiento del caravaggismo español.
Un grupo de artistas católicos de Utrecht, conocido como «Los caravaggistas de Utrecht», viajaron a Roma a principios del siglo XVII, y fueron profundamente influenciados por la obra de Caravaggio, como describe Bellori. al regreso a su ciudad, esta tendencia no duró mucho, pero durante la década de los 20's renació en la persona de pintores como Hendrick ter Brugghen, Gerrit van Honthorst, Andries Both y Dirck van Baburen.
En la siguiente generación, el caravaggismo influyó en varios pintores, como Peter Paul Rubens (quien realizó una copia de El entierro de Cristo), Rembrandt Harmenszoon van Rijn y Diego Velázquez, quien durante su estancia en Italia tuvo la oportunidad de conocer y estudiar sobre el arte de Caravaggio. (wikipedia).
OTRAS OBRAS DEL PINTOR:
1599.......................................... .......1600
1601.......... ............................1601......................................1602
1602..................................1605................................1605
1605..................................1606.............-....---........1609
1609................................................1610....................................1607
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La Música del Caravaggio
Giovanni Pier Luigi da Palestrina (1525-1594)
Missa Brevis: Kyrie-Gloria-Credo-Sanctus/Benedictus-Agnus Dei - The Tallis Scholars
Missa Papae Marcelli: Kyrie-Gloria-Credo-Sanctus-Benedictus-Agnus Dei - Pro Cantione Antiqua
Stabat Mater - Pro Cantione Antiqua
Alla Riva del Tebro - Motete
Salve Regina - O bone Jesu - Motetes
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Links de interés
http://www.artehistoria.jcyl.es/genios/pintores/1493.htm Muy completa web sobre Caravaggio, a destacar el análisis crítico de todas y cada una de las obras.
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Gonzalo nos regala esta joyita polifónica que el mismo nos presenta...
"Quisiera aportar mi granito de arena (aunque resulte difícil superar tanta profundidad mística), ofreciendo este pequeño (en lo físico) pero enorme fragmento (en lo musical), de otro coetáneo de Caravaggio, para rematar la jornada de manera magistral."
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