Semblanza histórico-biográfica
.....Otra rara estrella de fulgor personalísimo en la escena pictórica flamenca, segundo Bosco, Bruegel primero, fecundo fundador de dinastía de pintores --hijos, nietos, que heredaran del padre, del abuelo, la ilustrativa maestría--, es Pieter Bruegel, o Brueghel (que en sus dos formas es posible escribir un apellido/apelativo que el mismo pintor --y sus biógrafos--, utiliza indistintamente). Vendría al mundo el heterodoxo astro de la pintura en Bruegel o Brée, pequeña localidad homónima (de ella adoptaría el apellido) cercana a Breda, en el ducado de Brabante (como el Bosco), de cuando Flandes era territorio hispano bajo la hégiradel Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Carlos V, primero, y de su sucesor Felipe II, ya como parte separada del Sacro Imperio e integrado en el no menos sacro Imperio español, después. Flandes por aquel tiempo, a parte de ser cantera y crisol de los famosos Tercios que pánico causaran en Europa durante cien años, era región díscola a ser gobernada por nadie más que por sus propios habitantes, lo que les llevó a mantener durante ochenta años una constante guerra de liberación contra el Emperador. La Reforma protestante no hizo sino ahondar más en ese sentimiento de rebelde autonomía e independencia; aunque no sería hasta la Paz de Westfalia, en 1648, que Holanda obtendría el reconocimiento de su independencia como estado autónomo. Pieter Bruegel nació, pues, en una fecha imprecisa, comprendida entre el año 1525 y 1530, cerca de la ciudad que, otrosí, la pintura se encargaría de celebrar, al ser colocada en el mapa gracias a las magistrales manos de Diego de Velázquez --quien glosaría la rendición de los levantiscos holandeses en uno de sus levantamientos, ejerciendo de testigos verticalmente mudos las picas de los Tercios que dieran sobrenombre al cuadro--, y moriría en Bruselas, al comienzo de Septiembre de 1569. Viena, en su Kunsthistorisches Museum, guarda la mayor colección de entre sus 45 obras atribuidas; el resto se encuentra muy desperdigada y repartida por algunas de las mejores pinacotecas del mundo (Madrid, Londres, Munich, Nápoles, Berlín, Amberes, Rotterdam, Praga, Nueva York o San Diego, entre otras)......Se formaría, el de Bruegel, con Pieter Coecke van Aelst, en Amberes, en cuyo gremio de pintores se integraría en 1551. Entre 1551 y 1553 realiza un (obligado) viaje a Italia. Es muy posible que fuera durante este viaje, tanto por el itinerario --que incluía el paso por los alpes y la riqueza paisajista que transcurriendo de norte a sur, en un gradiente de color y actividad de creciente dinamismo colorista, impresionaría al joven maestro--, como por la estancia en la cuna del Renacimiento, cuando decidiera dedicar al paisaje una atención y preeminencia que nunca antes había tenido en la pintura; el escenario natural ya no realizaría una mera función de fondo, de relleno, sino que se constituiría en tema principal de la obra, pasando a un plano secundario, a veces casi anecdótico, el tema cultural representado (el Viaje a Egipto de la Sagrada Familia, la Parábola del Sembrador, Cristo Camino del Calvario, la Tenatación de San Antonio, la Adoración de los Magos en la nieve, etc). Tras este viaje regresaría a Amberes donde residiría ocho años más, hasta 1563, trasladándose posteriormente a Bruselas. Allí se casaría con la hija de su maestro, Mayken Coecke.
En 1567 se produce la cruenta campaña de represión contra los rebeldes neerlandeses a cargo de Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, III Duque de Alba, que daría lugar a uno de los más famosos cuadros de nuestro pintor, si bien disfrazado de tema bíblico: La Masacre de los Inocentes (identificando así al Duque de Hierro con Herodes). Al año siguiente, los condes de Egmont y de Horn, defensores de la libertad religiosa en Holanda contra la política del cardenal Granvela (consejero áulico, de origen francés, que implantaría la Inquisición en los Países Bajos), caballeros de la Orden del Toisón de Oro, leales al rey (mas no a su gobernador y vicario eclesiástico) y brazos fuertes en sus campañas militares (Egmont comandó las fuerzas realistas que derrotaran a los franceses en San Quintín), por su alineamiento con Guillermo de Orange (adscrito a la libertad de culto y protestante calvinista él mismo) contra la barbarie autoritaria de corte catolicista, fueron ejecutados (por decapitación) en la Plaza Mayor de Bruselas. ¿Qué habría ocurrido si nuestro Felipe II en vez de enclaustrarse en Madrid (Escorial), hubiera sido, como su padre, Carlos V, más viajero y condescendiente, más tolerante y conciliador, más europeo y menos tradicionalista? Posiblemente estaríamos hablando de un escenario continental completamente distinto. Por lo que parece, la sangre y la atmósfera hispana imprime un decisivo y severo carácter de austeridad, penitencia y alergia a la libertad. Pero... a lo que estamos. Pido disculpas por la excursión crítico-histórica.
Pieter Bruegel tuvo que ser protegido en esta convulsa época, pardójicamente, por el mismísimo Granvela, que a la sazón era coleccionista de sus obras. Ya se sabe que en tiempos de locura represiva son muchos los justos que pagan por los pocos pecadores. Táctica quirúrgica utilizada con (¿dudosa?) eficacia por todos los represores que en el mundo han sido: extirpar parte del tejido sano adyacente al tumoral para evitar recidivas (maniobra que la historia, con terca contumacia, se ha obstinado en demostrar ineficaz y contraproducente --y aun así...).
Temática y Comparativa con El Bosco
En el universo de El Bosco, el mundo es un sueño de Dios o un engaño del Demonio, y la Naturaleza recibe un tratamiento de "tentación perjudicial" para el ser humano. En Bruegel la Naturaleza, como en Espinoza, se erige en sustancia fundamental e indivisa de la acción de Dios, es la extensión donde tienen lugar las peripecias de los hombres. Las acciones de los seres humanos así enclavadas en medio de una Naturaleza sobrecogedora y dominante parecen como empequeñecidas; únicamente cuando el ser humano se integra en ella, cuando no pretende dominarla, cuando acepta su papel de actor de reparto sin arrogarse el de protagonista, es cuando la humanidad se naturaliza, y al naturalizarse se diviniza --si seguimos haciendo caso a Spinoza. A contrapelo de El Bosco, y complementándolo --quizá recibiendo de éste un guiño allá donde se encuentre--, en Bruegel el hombre se libera de la moral para disfrutar de las alegrías y sinsabores del día a día.
.....Así sus temas preferidos gozan en representar danzas y banquetes nupciales, proverbios populares (esa sabiduría del pueblo llano avalada por la experiencia), grandes escenarios paisajísticos; o bien, caricaturizan los aspectos más ordinarios de la vida corriente, gozándose en esconder (como si de Wally se tratara) al protagonista en el tumulto, en la barahúnda, en la muchedumbre; así, difícil será hallar a Cristo Camino del Calvario, a Juan el Bautista en su Sermón, a la Sagrada Familia en Belén, como si el autor quisiera diluir la acción ejemplar en lo que interesa, y para lo que interesa, que no es otra cosa que la comunidad de los hombres en su totalidad. En los cuadros más intimistas, con pocos personajes y más grandes, son los rasgos de éstos los que les resta gravedad: la Pintura de Bruegel es un canto a la vida, a las manifestaciones más simples de la cultura humana: la agricultura, la caza, los juegos, la danza y las comilonas de celebración; en una palabra: Buegel retrata la sociedad campesina holandesa del siglo XVI de manera realista. En los paisajes, por otra parte, en su traza, colorido y disposición ya adelanta lo que será de uso común en el barroco, e incluso me atrevería a decir que mucho hay de ese tratamiento en el posterior desarrollo por parte de los impresionistas franceses, los simbolistas alemanes y los grandes paisajistas ingleses.
En los temas demonológicos y fatalistas, en los fantásticos, en las alegorías, en las fábulas, es donde más se aproxima al imaginativo pintor de Balduque. Sus composiciones y seres imaginarios, no obstante, no gozan de lo alucinatorio que en aquél es característico. Bruegel se limita a representar un escenario irreal sin pretender que sea tomado como real, incidiendo en su sentido metafórico, portador de significado. Lo fantástico en Bruegel no es inquietante, no incomoda, se ve con distancia; mientras que la gran virtud y característica de El Bosco es la verosimilitud con que introduce su universo alucinatorio en lo cotidiano.
.....En la Caída de los Ángeles Rebeldes, por ejemplo, el cuadro probablemente más boschiano de todos los de Bruegel, un tumulto de seres con apariencias reales e irreales se entremezclan, entremezclándose también los símbolos que representan. Aquí la naturaleza está ausente (al representarse un acontecimiento abstracto, lo natural estaría de más), la forman los propios personajes, salvo por un cielo azul que se presume en la mitad superior y un semicírculo que bien pudiera ser sol o puerta de los cielos; en el escenario flotan peces y pingüinos, pululan aves, los mejillones gigantes semejan enormes mariposas, y una multitud de seres surgidos de la calenturienta imaginación de Pedro Botero son combatidos a capa y espada por los ángeles y, en posición central, por un enigmático arcángel Gabriel investido y revestido de armadura. En el Triunfo de la Muerte y Dulle Griet (algo así como Greta la Loca), la reminiscencia de los infiernos boschianos vuelve a hacerse patente, siempre, no obstante, presentando las figuras antropomórficas en un contexto de cómic (la estética oscura y tenebrosa de Frank Miller, autor de Sin City o la "termopilana" 300 puede deber mucho a estos dos pintores).
La Torre de Babel, de la que haría tres versiones (una de ellas, desgraciadamente, perdida), es quizá su pintura más famosa y reconocible. La "pequeña" Torre, ubicada actualmente en Rotterdam, es de presentación más sencilla, más sintética, posee menos elementos, aunque la soberbia estructura resulta más sólida y pretenciosa; Nimrod aquí no aparece. En cambio en la segunda versión de la Torre, ubicada en el Kunsthistorisches Museum de Viena, la estructura apenas se ha levantado seis porticadas plantas, si ciclópeas; en su representación aparecen diversos artilugios de construcción, como poleas y elevadores, las figuras humanas están más presentes, y, expresamente, lo está Nimrod, en un primer segundo plano, en lo alto de una colina pidiendo cuentas a los alarifes que piden excusas, a su vez, por el desastre sobrevenido. En ambas el derrumbe es ostensible, pero en la versión "pequeña" tiene lugar en el mismo instante en que el autor está recogiendo la escena (como si de una instantánea se tratase); mientras que en la versión "grande", la de Viena, el derrumbe ya se ha producido. En ésta segunda versión la ciudad se distingue perfectamente , a la derecha, detrás de la Torre.
.....Especial mención requieren las dos grisallas que realizara Bruegel: La Muerte de la Virgen, y Cristo y la Mujer Adúltera. Esa impresión de irrealidad que transmite la técnica sirve al autor para presentarnos las respectivas escenas imbuidas de un halo irreal y hasta cierto punto inverosímil, pétreo no orgánico, fantasmagórico y siempre distante, como si no perteneciese a la vida que nos toca vivir. ¿No verían sus católicas eminencias una crítica velada al catolicismo en estas pinturas de atmósfera tan improbable? ¿No podría considerarse así, desde esta perspectiva crítica, la técnica empleada para representar tales escenas?
Los dibujos para grabados que realizara Bruegel contienen más tintes "morales" y "alegóricos" (propias del grabado) que sus cuadros, también más elementos satíricos y fantásticos; pero, incluso en este más limitado medio de expresión, prodiga lo paisajístico y las escenas de género, que resuelve con maestría y verosimilitud. A destacar sus series sobre los Siete Pecados Capitales, y su réplica, las Virtudes Teologales (3) y Cardinales (4); así como los paisajes.
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La música que glosará este espacio vendrá de la mano de Jacob Obrech, heredero musical del gran Johannes Ockeghem y uno de los más eminentes compositores flamencos del siglo XVI, quien, con el más excelso Josquín Desprez, impulsaría la música Europea en ese tránsito que suponía pasar de la Edad Media a la Edad Moderna.
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GALERÍA
Pieter Bruegel El Viejo
(1525/30 -1569)
The Adoration of the Kings in the Snow, 1557
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The Parable of the Sower, 1557
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Netherlandish Proverbs, 1559
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Netherlandish Proverbs, 1559 (alternate)
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Landscape with the Fall of Icarus, 1558-60 (copy of the last original)
Fall of the Rebel Ángels , 1562
Fall of the Rebel Ángels , 1562. Set Details
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The Triumph of Death, 1562
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The Triumph of Death, 1562 (alternate)
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Naval Battle of Naples, 1562
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Two Chained Monkeys, 1562
The Suicide of Saul, 1562 (alternate)
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Landscape with the Flight into Egypt, 1563
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Portrait of a Woman, 1563
The "Little" Tower of Babel, 1563 (Rotterdam)
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The "Little" Tower of Babel, 1563 (Rotterdam) (alternate)
The Tower of Babel, 1563 (Viena) (alternate)
The Adoration of the Magi, 1564
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The Adoration of the Magi, 1564 (alternate)
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The Death of the Virgin, 1564
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Haymaking (July), 1565 (alternate)
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Christ and the Woman taken in Adultery, 1565
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Census at Bethlehem, 1565
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The Massacre of the Innocents, 1565 (Vienna)
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The Massacre of the Innocents, 1565 (London)
Hunters in the Snow (January), 1565
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Winter Landscape with Skaters and a Bird Trap, 1565
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Winter Landscape with Skaters and a Bird Trap, 1565 (alternate)
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The Hay Harvest (August), 1565
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The Hay Harvest (August), 1565 (alternate)
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A Peasant Couple Attacked by Robbers, 1567
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Parable of the Blinds (De Parabel der Bliden / La Parábola de los Ciegos), 1568.
Parable of the Blinds (De Parabel der Bliden / La Parábola de los Ciegos), 1568 (alternates)
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The Sermon of St. John the Baptiste, 1566 (alternate)
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The Weeding Dance in the Open Air, 1566.
The Weeding Dance in the Open Air, 1566 (alternate)
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The Conversion of St Paul, 1567.
The Conversion of St Paul, 1567 (alternate)
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The Land of Cockayne (Het Luilekkerland / El país de Jauja), 1567
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Misanthrope, 1568.
The Three Soldiers, 1568
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Peasant and Birdnester, 1568
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Peasant and Birdnester, 1568 (alternate)
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Peasant Wedding, 1568
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The Beggars, 1568
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The Temptation of St Anthony
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The Magpie on the Gallows, 1568
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The Magpie on the Gallows, 1568 (alternate)
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The Wine of the feast of St Martin, 1565-68
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Peasant Dance, 1569
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Peasant Dance, 1569 (alternate)
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ENGRAVINGS
The Painter and the Art Lover, 1565 /// Peter Brueghel the Elder
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Country Concerns, 1552 /// Ice Skating before the Gate of Saint George, Antwerp, 1553
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Alpine Lanscape, 1556 /// Big Fishes eat Small Fishes, 1556
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Crafty Bird Catcher, 1556 /// Soldiers at Rest, 1556
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The Ass in the School, 1556 /// The Parable of the Wise and the Foolish Virgins
The Fair of Hoboken, 1559 /// The Fair of St George's Day, 1559
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The Hare Hunt /// 1560 View of Tivoli, 1556
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Armed Three Master with Daedalus and Icarus in the Sky, 1561-1562 /// Man of War between two Galleys, 1565
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Wooded Region 1565-66 /// The Beeckeepers and the Birdnester, 1568
The Seven Deadly Sins (Los Siete Pecados Capitales), 1556-58 - and the Seven Virtues 1559-1560
Pride (Soberbia) /// Lust (Lujuria)
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Wrath (Ira) /// Envy (Envidia).
Greed (Avaricia) /// Laziness (Desidia)
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Gluttony (Gula) /// Faith (Fe)
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Hope (Esperanza) /// Charity (Caridad)
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Temperance (Templanza) /// Prudence (Prudencia)
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Justice (Justicia) /// Fortitude (Fortaleza)
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The Last Judgement /// Philistine
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Patientia /// The Penitent Magdalene
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Go Ye into the Emmaus /// Jerome in the Desert
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Landscape of the Alps /// Market for the Country
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Running away the Mother of God into Egypt /// The same God so that he obtained of the Magus was by demons be pulled in pieces
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Seascape with the View of Antwerp /// The Cart, the Belgium
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The Alchemist
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