lunes, 30 de septiembre de 2013

Leyendo a Roberto Bolaño IV - GALERÍA: Gil Elvgren





Sigo leyendo a (Roberto) Bolaño

.....Sigo leyendo a Bolaño, Roberto Bolaño. Me he embolañado ¡Qué se le va a hacer! Y eso que en mi primera aproximación a su obra (El Tercer Reich) salí zumbando. No pasé de la octava página. Por allí nada hacía recordar al funesto régimen nazi; es más, incluso su ambientación era contemporánea (una pareja alemana de vacaciones en España, en la costa catalana); su lenguaje, actual; su estética, convencional; su desarrollo, el de un diario aparentemente trivial. Me fui espantado, pero por falta de espanto. Creí que iba a sumergirme en una historia que desvelara, revelara o alumbrara alargadas sombras de almas torturadas, no más fuera ya en una vida alejada de su momento de esplendor, refugiada en alguna parte de la actualidad (Argentina, Brasil, Chile,... los numerosos enclaves de la costa mediterránea española --Moraira, Calpe--, la Costa del Sol), donde seguiría palpitando aquél descerebrado y excesivo empeño por poner el mundo en manos de la Raza Aria, tamizada la especie humana de lacras e impurezas... Pero no. Allí no había nada de eso. El título era una metáfora (creí entonces); claro, cosa muy propia de literatos. Me sentí estafado en mi expectante previsibilidad, y me alejé desairado. Ahora tengo el libro otra vez en mi poder. Lo volví a pedir a la Biblioteca Municipal. Ahí está, esperando su turno (pues que en mi casa los libros aguardan, pacientes, turno como en el Banco, el supermercado o la cola del paro), ya que a partir de aquel primer rechazo, algo, no obstante, algo insidioso, como un invisible y eficaz virus, quedó inoculado en mi magín (no me arredro fácilmente ante las primeras impresiones). Así que resolví hacer lo que suelo hacer cuando abordo a un autor desconocido para mí: consulté cuáles eran las obras más paradigmáticas del autor chileno muerto prematuramente (lo que siempre añade un plus de morbo a la cosa, y un aura más intensa de leyenda alrededor del fenecido; algo semejante a la que irradiaría de mi tocayo, Rodrigo Díaz de Vivar, cuando, ya muerto y encastrado al fogoso Babieca con taimada fábrica que lo sujetaba enhiesto, estandarte en mano, ganara al fiero almorávide la batalla que rompiera el sitio de Valencia), ya que como en el caso de los vinos, nada mejor para conocer y distinguir el terroir o carácter de un (mal llamado) caldo que degustar sus mejores expresiones (algo que sabe sobradamente todo buen aficionado).

...Opté, pues, por el Romanée Conti literario de Bolaño. Y ni corto ni perezoso acometí la lectura de esta obra --ya la más mítica y legendaria de toda su producción--, una obra póstuma, inacabada (e inacabable), inmensa (en extensión y en intensidad), la obra que parecía ser haberlo encumbrado ya completamente al Olimpo de la literatura en castellano. Estoy hablando de 2666, obra con atractivo título, misterioso, sugerente (portan siempre los guarismos --sobre todo ciertos guarismo-- un carácter que enraiza profundamente en el misterio de lo incomprensible). También me pedí esa otra obra revolucionaria (eso decían las críticas) que es Los Detectives Salvajes. Acometería su lectura cuando terminara de leer las mil ciento diecinueve páginas de la obra capital. Con sistemático plan y voluntarioso celo, me puse a devorar --sí o sí-- el tocho bolañano. Teniendo en cuenta tipografía y tamaño de la letra, el objetivo sería leer un mínimo de 50 páginas al día; en tres semanas a más tardar me lo habría ventilado. No necesité más que dos. La novela (el novelón, por tamaño que no por cursi o por plomo) me atrapó inmediatamente. Allí había gran calidad literaria, prosa intensa, pero fácil de leer. Acostumbrado a admirar la atildada y elegante, a veces compleja pero luminosa, de Henry James, la prosa de Bolaño era endiabladamente clara, prístina, desnuda, pero erudita. Una constante en toda la obra de Bolaño es su erudición, cita autores que sólo en círculos muy selectos se conocen, y mucho menos se leen (muchos de los cuales, también, se los inventa, con obras y todo). 2666 no aludiría directamente a la bestia, pero uno la oía respirar bajo el texto. Portentosa imaginación y original desarrollo.

.....Tardé unos días en salir de un estado que me sería difícil describir: no era perplejidad ni asombro, y, a la vez, yo, que ni me asombro ni me confundo fácilmente, era presa de una mezcla de ambas. Tampoco diría que estuviera anonadado, no más allá de un anonadamiento literario, nada físico o emocional. Inmediatamente supe que no necesitaba leer ninguna crítica sobre el libro, en mi interior, a medida que leía, fue tomando forma una certeza: estaba ante una obra de proporciones colosales, extraordinariamente bien escrita, de largo, larguísimo aliento. Y, además, actual. Bebiendo en fuentes arcanas, pero actual. Alimentándose del más exquisito solomillo cultural curado en las cámaras del saber al abrigo del tiempo. Entonces conocí al Bolaño que yo intuía, al Bolaño que se redimió de ser hombre para alcanzar el estado de mito. Arcimboldi, Benno von Arcimboldi, seudónimo del prusiano Hans Reiter, ya nunca abandonará mi memoria hecha del espíritu perfundido de las cosas.

.....Y así, tras concederme un mínimo lapso de tiempo para salir del estado semi-catatónico en que caí, y tras limpiar mi conciencia de ecos arcimboldianos con otras lecturas y quehaceres, me sumergí en los Detectives Salvajes, novela aún más original: en la forma y en el fondo. El siempre fragmentario Bolaño en estado puro, quintaesenciado, colmo y zenit de lo fragmentario como constitutivo del Todo, de un Todo interconectado (prueba fehaciente de que ese Todo no es más que lo Uno vuelta su conciencia sobre sí mismo). Ahí, página tras página, fecha tras fecha de un diario personal-impersonal, pero plagado de personajes; personaje tras personaje instilando las fechas de días iguales a otros días, que se imbrican en otros días y que empujan a otros días contra los días de otros personajes. Pieza de marquetería, taraceado literario que genera o expresa un universo original, mosaico de fantástica imaginería literaria, ficción polifacética de destello diamantino. ¿Obras maestras? Puede ser. El tiempo lo confirmará o lo desmentirá. Pero sí estamos ante algo nuevo, una incursión por terrenos desconocidos. Es Bolaño el apergaminado mapa de un tesoro oculto cuyo territorio es preceptivo visitar, quizá su tesoro no sea más que esa visita, ese recorrer el espacio imaginado, quizá el tesoro espere a la vuelta de cada recodo del camino, bajo cada perfil del relieve allí consignado, fundido en cada motivo geográfico en él señalado. Yo creo más bien esto.

.....Después vendrían los cuentos (Putas asesinas y Llamadas telefónicas), y Los perros románticos (florilegio del Bolaño poeta, del Bolaño que ante todo se sentía poeta, del Bolaño que soñaba con ser poeta, sin presentir que lo que verdaderamente latía en él era un corazón de soberbio prosista). No deberíamos olvidar que los mejores prosistas de la literatura, han sido, así mismo, grandes poetas o poetas frustrados, o poetas cuyo poesía estaba llamada a hilvanarse a la prosa más excelsa, como esos brocados entretejidos con hilos de oro y plata a la seda más preciada. Y después vendría la alucinante y original Estrella Distante. Por el medio, también leí Bolaño Salvaje, completo libro homenaje (trasunto de la obra del chileno), constituido por los testimonios críticos  de algunos de sus amigos y admiradores literatos.

.....Y ahora le toca el turno a su novela revelación, la que lo dio a conocer: La literatura nazi en América. Me ha vuelto a sorprender. Yo esperaba una trama ficticia urdida en torno a las figuras más sospechosamente fascistas del continente americano, un a modo de saldar cuentas con la historia extremista y golpista del Nuevo Mundo. Pero no. Resulta que es un saldar cuentas, sí, pero de la forma más inteligente posible, que le cabe a un ser inteligente: la sátira. Pero no una sátira quevedesca o gongorina, nada de eso. Una sátira a lo anglosajón, a lo Chesterton o a lo Sharpe; es decir: imperceptible, tejida a lo aparentemente serio y ordinario. Vaya por delante que es el libro más divertido que haya leído en mucho tiempo. No es raro que brote, espontánea, la carcajada a medida que las frases se asoman a mis ojos. Es más, no sólo no es raro, sino que es lo habitual. Tras un inicio algo más comedido, en que sólo la sonrisa hace su aparición, como un guiño o un reflejo condicionado al espíritu de la letra impresa, poco a poco la vorágine en que se convierte la descripción de vida y obra de los diversos personajes/escritores, completa y enteramente ficticios, pero cargados de rasgos claramente reconocibles, va convirtiendo el libro en un punto de encuentro caricaturesco, donde a una figura estrambótica sucede otra estrafalaria, y, a ésta, otra que funde en sí lo ridículo y lo extravagante. Ya se sabe que entre las mejores caricaturas posibles se encuentran aquella realizadas con preciso y agudo trazo erudito, donde éste aporte a lo caricaturizado una carga significativa que sugiere y provoca la paradoja, con lo que se refuerza su fin satírico. Pero lo mejor de todo es que las descripciones se realizan con aparente rigor, con impecable seriedad, lo que induce e incita aún más, en contraste, la hilaridad. Bolaño se venga del extremismo que azotó (¿azota?) América (tanto latina como anglófona) ridiculizándolo desde la más absoluta erudición (botarates hinchas/poetas de fútbol que leen a Klausevitz; nazis mulatos, profesionales del plagio, cuyo ideal es el pastiche ario/masai; ilustrados y viajados con poco lustre y mucho inmovilismo, etc.).

.....Este libro, que ahora tengo entre manos, ha sido el motivo de que a los tres posts ya dedicados a Bolaño, se añada éste, con una cata de algunos de sus muchos divertidos momentos (concretamente tres de sus esperpénticas biografías). Presumo que Bolaño, con esta obra, no sólo quiso saldar cuentas, sino que también pretendió realizar una caricatura de tanto merodeador de lo literario, empecinado (y convencido) en ser faro de las letras (incluso no es descartable que entre las muchas biografías que glosa no aparezcan ciertos rasgos comunes a todo escritor en trance de serlo; es decir: comunes, de alguna manera, a él mismo, en los comienzos titubeantes a la busca del estilo y la voz propias, sólo que hipertrofiados y cargando las tintas en el carácter atrabiliariamente extremista y asombrosamente simple del personaje imaginado).
.....Como es imposible transcribir todas las carcajadas suscitadas en sus páginas, me remitiré a un par o tres de ejemplos, que no serán, de todas formas los mejores, sino los más adecuados, en cuanto a su extensión, para ser incluidos aquí (Ni qué decir tiene que los más agudos y sublimes momentos divertidos están inclusos en las biografías más extensamente citadas, que de todas formas, raramente superan las seis páginas). Para disfrutar plena y completamente con La literatura nazi en América habrá que acudir a la librería o biblioteca. Cosa que siempre recomendaré encarecidamente, no sólo por hacerme disculpar la infracción sobre los derechos de autor (en los que, sin entrar ahora en ardua materia, no creo), sino por cariño a mis lectores, porque me gusta que disfruten, al menos, como yo lo he hecho leyendo estas páginas.

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LA LITEARTURA NAZI EN AMÉRICA
Roberto Bolaño
(1953-2003)

.....SILVIO SALVÁTICO
.....Buenos Aires, 1901-Buenos Aires, 1994

.....Entre sus propuestas juveniles se cuenta la reinstauración de la Inquisición, los castigos corporales públicos, la guerra permanente ya sea contra los chilenos o contra los paraguayos o contra los bolivianos como una forma de gimnasia nacional, la poligamia masculina, el exterminio de los indios para evitar una mayor contaminación de la raza argentina, el recorte de los derechos de los ciudadanos de origen judío, la emigración masiva procedente de los países escandinavos para aclarar progresivamente la epidermis nacional oscurecida después de años de promiscuidad hispano-indígena, la concesión de becas literarias a perpetuidad, la exención impositiva a los artistas, la creación de la mayor fuerza aérea de Sudamérica, la colonización de la Antártida, la edificación de nuevas ciudades en la Patagonia.
.....Jugador de fútbol y futurista.
.....De 1920 a 1929 escribió y publicó más de doce poemarios, algunos de los cuales obtuvieron premios municipales y provinciales, y frecuentó salones literarios y las cafeterías de moda. Desde 1930, encadenado por un matrimonio desastroso y por una prole numerosa, trabajó como gacetillero y corrector en varios periódicos de la capital y frecuentó los tugurios y el arte de la novela que siempre le fue esquivo, publicó tres: Campos de Honor (1936), que trata de desafíos y de duelos semiclandestinos en un Buenos Aires espectral, La Dama Francesa (1949), un relato de prostitutas generosas, cantantes de tango y detectives, y Los Ojos del Asesino (1962), curiosa premonición del psico-killer cinematográfico de los setenta y ochenta.
.....Murió en el asilo de ancianos de Villa Luro, con una maleta repleta de viejos libros y manuscritos inéditos por toda posesión.
.....Sus libros nunca se reeditaron. Sus inéditos probablemente fueron arrojados a la basura o al fuego por los celadores del asilo.

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..... LUIZ FONTAINE DA SOUZA
.....Río de Janeiro, 1900-Río de Janeiro, 1977

.....Autor de una temprana Refutación de Voltaire (1921) que le valió elogios en los círculos literarios católicos del Brasil y la admiración del mundo universitario dada la vastedad de la obra, 640 páginas, el aparato crítico y bibliográfico y la manifiesta juventud del autor. En 1925, como para confirmar las expectativas creadas por su primer libro, aparece la Refutación de Diderot (530 páginas) y dos años después la Refutación de d'Alembert (590 páginas), obras que lo colocan a la cabeza de los filósofos católicos del país.
.....En 1930 se publica la Refutación de Montesquieu (620 páginas) y en 1932, Refutación de Rousseau (605 páginas).
.....En 1935 pasa cuatro meses internado en una clínica para enfermos mentales de Petropólis.
.....En 1937 ve la luz La Cuestión Judía en Europa seguida de un Memorándum sobre la Cuestión Brasileña, libro voluminoso como todos los suyos (552 páginas), en donde expone los peligros que aguardan al Brasil (desorden, promiscuidad), si el mestizaje se generaliza.
.....En 1938 aparece la Refutación de Hegel seguida de una breve Refutación de Marx y Feuerbach (635 páginas), que muchos filósofos e incluso algún lector consideran  la obra de un demente. Fontaine, es irrefutable, conoce la filosofía francesa (domina perfectamente este idioma), la filosofía alemana, en cambio, no. Su Refutación de Hegel, a quien en no pocas ocasiones confunde con Kant y en otras, aún peor, con Jean Paul, con Hölderlin y con Ludwig Tieck, es, según los críticos, patética.
.....En 1999 sorprende a todo el mundo con la publicación de una novelita sentimental. En sus escasas 108 páginas (otra sorpresa) narra los requiebros amorosos de un profesor de literatura portuguesa por una joven rica y casi analfabeta de Novo Hamburgo. La novela, Lucha de contrarios, apenas se vende pero su fino estilo, su agudeza y la perfecta economía verbal con que está construida no pasan desapercibidas para algunos críticos que la alaban sin reservas.
.....En 1940 es ingresado otra vez en el sanatorio de Petrópolis de donde no saldrá hasta tres años más tarde. Durante su larga estancia, si bien interrumpida por las fiestas navideñas o vacacionales con la familia y siempre bajo el cuidado estricto de una enfermera, escribe la continuación de Lucha de contrarios. Con una escritura quebrada, ajena al fino estilo, a la agudeza y a la economía verbal de la precedente, Atardecer en Portoalegre narra desde varios puntos de vista de un mismo personaje, el profesor de literatura portuguesa, un atardecer interminable, y sin embargo velocísimo, en la meridional ciudad brasileña, mientras simultáneamente en Novo Hamburgo (y de ahí el subtítulo Apocalipsis en Novo Hamburgo) los criados, la familia y posteriormente la policía se enfrentan al cadáver de la rica heredera analfabeta hallada en su habitación, bajo la gran cama de baldaquino, cosida a puñaladas. La novela, por imperativos familiares, no se publicará hasta bien entrada la década de los sesenta.
.....Después , un largo silencio. En 1943 publica un artículo en un periódico de Río oponiéndose a la entrada de Brasil en la Segunda Guerra Mundial. En 1948 publica un artículo en la revista Mujer Brasileña sobre flores y leyendas de Pará, especialmente la zona entre el río Tapajoz y el río Xingu.
.....Así hasta que aparece Crítica a "El Ser y la Nada", vol. I (350 páginas), que trata únicamente de los apartados dos y tres de la Introducción, En busca del Ser, de el ser y la Nada. Estos apartados son El cogito prerreflexivo y el ser del percipere  y El ser del percipi y en su denostación Fontaine recurre desde los filósofos presocráticos hasta los films de Chaplin y Buster Keaton. En 1957 aparece el segundo volumen (320 páginas), que trata sobre el apartado quinto, La prueba ontológica, y el apartado sexto, El ser en sí de la Introducción de la obra sartreana. Ambos libros pasan diríamos de puntillas por el ámbito filosófico y universitario brasileños.
.....En 1960 aparece el tercer volumen. En seiscientas páginas justas aborda los apartados tercero, cuarto y quinto (La concepción dialéctica de la nada, La concepción fenomenológica de la nada y el origen de la nada) del capítulo primero (El Origen de la Negación) de la Primera Parte (El Problema de la Nada) y los apartados primero, segundo y tercero (Mala fe y mentira, Las conductas de mala fe  y  La "fe" de la mala fe) del capítulo segundo (La Mala Fe) de la Primera Parte.
.....En 1960, y en medio de un silencio sepulcral ni siquiera roto por su propio editor, aparece el cuarto volumen (555 páginas) que enfrenta los cinco apartados (La presencia ante sí, La factilidad del para-sí, El para-sí y el ser de los posibles y El yo y el circuito de la Ipseidad) del capítulo primero (Las Estructuras Inmediatas del Para-Sí) de la Segunda Parte (El Ser-Para-Sí) y el apartado segundo y tercero (Ontología de la temporalidad, a) "La Temporalidad estática", b) "Dinámica de la Temporalidad" y Temporalidad original y Temporalidad psíquica: la reflexión) del capítulo segundo (La Temporalidad) de la Segunda Parte.
.....En 1962 aparece el quinto volumen (720 páginas) en donde saltándose el capítulo tercero (La Trascendencia) de la Segunda Parte, casi todos los apartados del capítulo primero (La Existencia del Prójimo) y todos los apartados sin excepción del segundo (El Cuerpo) de la Tercera Parte (El Para-Otro) aborda, pródigo y fiero, el apartado tercero (Husserl, Hegel, Heidegger) del capítulo primero y los tres apartados [La primera actitud hacia el prójimo: el amor, el lenguaje, el masoquismo, La segunda actitud hacia el prójimo: la indiferencia, el deseo, el odio, el sadismo y  El "ser-con" (Mitsein) y el "nosotros", a) 'El "Nos"-objeto', b) 'El nosotros-sujeto] del capítulo tercero (Las Relaciones Concretas con el Prójimo) de la Tercera Parte.
.....En 1963, mientras trabajaba en el sexto volumen, sus hermanos y sobrinos se ven obligados a internarlo nuevamente en un sanatorio para enfermos mentales, en donde permanecerá hasta 1970. No volvió a escribir. La muerte lo sorprenderá siete años más tarde, en su confortable piso de Leblon, en Río, mientras escucha un disco del compositor argentino Tito Vázquez y observa por los ventanales el atardecer carioca, los coches, la gente que discute en las aceras, las luces que se encienden, se apagan, las ventanas que se cierran.

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.....GUSTAVO BORDA
.....Guatemala, 1954-Los Ángeles, 2016

.....El más grande y el más desgraciado de los autores de ciencia-ficción guatemaltecos tuvo una infancia y adolescencia campesina. Hijo del capataz de la hacienda Los Laureles, la biblioteca de los patrones de su padre le proporcionó las primeras lecturas y las primeras humillaciones. Ambas, lecturas y humillaciones, no escasearían a lo largo de su vida.
.....Le gustaban las mujeres rubias y su apetito era insaciable, legendario, fuente de mil chistes y bromas pesadas. Propenso al amor y al amor propio, su vida fue ciertamente un rosario de humillaciones que supo llevar con la entereza de una fiera herida. Abundan las anécdotas californianas (en la misma medida en que escasean las anécdotas guatemaltecas en donde llegó a ser considerado, si bien no por mucho tiempo, el escritor nacional): se dice que era el blanco predilecto de todos los sádicos de Hollywood; que se enamoró de al menos cinco actrices, cuatro secretarias, siete camareras y que por todas fue rechazado con grave perjuicio para su dignidad personal; que en más de una ocasión lo golpearon brutalmente los hermanos, los amigos o los novios de las mujeres de las que se enamoraba; que a sus amigos les complacía hacerlo beber hasta reventar y que luego lo dejaban tirado en cualquier parte; que fue estafado por su agente literario, por su casero, por su vecino (el guionista y escritor de ciencia-ficción mexicano Alfredo De María); que su presencia en reuniones y congresos de escritores de ciencia-ficción norteamericanos constituía el blanco de los sarcasmos, el desprecio (Borda, al contrarío que la mayoría de sus colegas, carecía de los más elementales conocimientos científicos; su ignorancia en el campo de la astronomía, la astrofísica, la física cuántica, la informática, era proverbial) y la befa; que su simple existencia, en fin, solía hacer aflorar de inmediato los instintos más bajos y más ocultos en la gente que por una u otra causa se cruzaba en su vida.
.....No hay constancia, no obstante, de que nada lo desmoralizara. En sus Diarios les echa la culpa de todo a los judíos y a los usureros.
.....Gustavo Borda medía a duras penas un metro cincuenta y cinco centímetros, era moreno, de pelo negro y tieso y de dientes enormes y muy blancos. Sus personajes, por el contrario, son altos, rubios, de ojos azules. Las naves espaciales que aparecen en sus novelas llevan nombres alemanes. Sus tripulantes también son alemanes. Las colonias espaciales se llaman Nuevo Berlín, Nueva Hamburgo, Nuevo Frankfurt, Nuevo Koenigsberg. Y su policía cósmica viste y se comporta como seguramente hubieran vestido y se hubieran comportado las SS de haber podido sobrevivir hasta el siglo XXII. Por lo demás sus argumentos siempre fueron convencionales: jóvenes que emprenden un viaje iniciático, niños perdidos en la inmensidad del cosmos que encuentran a viejos navegantes llenos de sabiduría, historias fáusticas de pactos con el diablo, planetas en donde es posible encontrar la fuente de la eterna juventud, civilizaciones perdidas que siguen subsistiendo de forma secreta.
.....Vivió en Ciudad de Guatemala y en México, en donde desempeñó todo tipo de trabajos. Sus primeras obras pasaron completamente desapercibidas.
.....Tras la traducción al inglés de su cuarta novela, Crímenes sin resolver en Ciudad-Fuerza, se convirtió en escritor profesional y se trasladó a vivir a Los Ángeles, ciudad que ya no abandonaría.
En cierta ocasión, preguntado por qué sus historias tenían ese componente germánico tan extraño en un autor centroamericano, contestó: Me han hecho tantas perrerías, me han escupido tanto, me han engañado tantas veces que la única manera de seguir viviendo y seguir escribiendo era trasladarme en espíritu a un sitio ideal... A mi manera soy como una mujer en un cuerpo de hombre...

*Recién acabo de transcribir estos fragmentos y descubro, fortuitamente, que el libro se encuentra en la red, en archivo PDF, aquí: La literatura nazi en América. O sea que ya no hay excusa para no leerlo y divertirse de lo lindo.



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GALERÍA

Gil Elvgren
1914-1980

Pin-Ups

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Del derecho y del revés, del revés y del derecho: cuatro pespectivas
Perfection - Gil Elvgren 1948Shell Game (Shell-Shocked) - Gil Elvgren 1959
Partial Coverage (Flashback; Sunnyside Up) - Gil Elvgren 1960Modern Venus - Gil Elvgren 1949
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La mujer en rojo...
Vision of Beauty, 1947
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¡Chucho juguetón!
Ticklish Situation, 1957
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¿Diario íntimo?
Thinking of You (Retirement Plan), 1962
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Fruta paradisiaca
The Winner (A Fair Catch), 1957
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¡Pupa!
The Wrong Nail (Wrong Nail), 1967
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¡Lo importante son las uñas!
The Finishing Touch (Polished Performance),1960
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¡Llamadas telefónicas!
The Right Number, 1961
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Macedonia
Tasteful Design , 1965
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¡Otro chucho juguetón!
Taking Way (Southern Exposure), 1950
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¡Transgresora!
Taking a Chance (A Bikini A Toll), 1962
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¡Espectro luminoso!
Swim, Anyone?, 1969
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Mirada Velada
Suzette (Black Chiffon), 1956
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El tridente de Poseidón
Surprising Catch - Gil Elvgren 1952
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Altiva... y Divertida
Suzanne - Gil Elvgren 1963Surprise Package (Maybe You Weren’t Expecting This) - Gil Elvgren 1947
Suzanne, 1963  -  Surprise Package (Maybe You Weren’t Expecting This), 1947
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¡Misi, misi!
Some Cute Tricks, 1951
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Veo, veo...
Splendid View (Out to Sea), 1960
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Barbacoa...
Smoke Screen , 1958
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Puerta pillina
Skirting the Issue, 1952
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Ligonas
Sheer Comfort - Gil Elvgren 1959
Sheer Comfort , 1959  -  Simone, 1967
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Perfil en malva
Roxanne, 1960
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Cabalgata de Walpurgis
Riding High , 1958
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¡Pleno!
Pot Luck, 1961
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¡Otro chucho juguetón...!
Oh, No!, 1968
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Mariposeo...
Nature Girl (Something for Netting?), 1956
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¡Mona, pero mona, mona!
Mona (Heartwarming), 1959
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A-salto de cama...
Mitzi (Sleepy Time Girl), 1961
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Apertura de Dama...
Man’s Best Friend, n.d
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Una ardilla en la rodilla
Making Friends, 1951
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Dichoso desliz... amiento.
Look Out Below (Easy Does It), 1956
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La ventana indiscreta...
Jeepers, Peepers (Jeepers Creepers; It’s Much to Hot…), 1948
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Pitonisa para Mil y Una Noches...
I’m a Happy Medium (And Find Out How the Future Looks), 1947
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Pensatriz con chuchín
n for a Tanning (Smart Grab), 1944
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Pompas, pompitas...
In a Lather - Gil Elvgren 1952
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La muchacha de las curvas de oro
Golden Beauty, 1957
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Sonrisa sin lágrima
Gay Nymph, 1946
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¡No es para menos...!
Fascination, 1952
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Invitación al follaje...
Enchanting, 1953
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¡Bué!
Dream Girl, 1945
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La Guerrera del Antifaz...
Did You Recognize Me By My Voice? - Gil Elvgren 1948
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Flor
Darlene (Bedside Manner) - Gil Elvgren 1958
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Derrapando...
Curving Around (Sharp Curves) - Gil Elvgren 1960
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Perfume
Captivating, 1962
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Abanico
Bewitching, 1956
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¡Al loro...!
Bare Essentials, 1957
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Marina estilizada
And the Wind Blew, 1940s
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¡Qué susto!
A Pleasing Discovery, 1942
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Más llamadas telefónicas...
A Number to Remember, 1955
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