ConSentido Propio: Reflejos de la Cara Oculta (I) - MEDIA: Pink Floyd (1): 1967-1972.

Toda vida tiene su banda sonora, la cual, en cierto modo,

podría decirse que define el carácter de cada individuo.

El conjunto de todas las melodías que dejan su huella en un alma

y la singular relación significativa —y emocional—

que establecen, bien entre sí, bien con cada persona,

es lo que podría denominarse como mapa psíquico-melódico individual.

Un mapa que, como una huella dactilar, es único e irrepetible.

Puede haber rasgos comunes (como hay gustos semejantes),

pero nunca hay dos bandas sonoras idénticas.

El ser humano puede ser designado con una especie de ecuación melódica,

donde guarismos, variables e incógnitas están en función de la singularidad.

Descubriendo la Cara Oculta. Héctor Amado

Reflejos de la cara oculta

Brain Damage/Eclipse

.....Es como si una parte de nosotros, la parte más pura y auténtica, la menos influida y mediatizada, se hubiera quedado prendida de un momento en que la encrucijada de la vida demandó de nosotros la decisiva elección: seguir incontaminados o sumergirnos en la corriente principal, expuestos a todo tipo de contaminación circulante, esa corriente donde fluye lo vivo junto a lo muerto, lo lozano fundido a lo decrépito, lo falaz trenzado a lo verdadero, todo mezclado indiscriminadamente, llegando a formar un caldo indistinguible. E hicimos la elección, y nos dejamos arrastrar por la fría corriente, no sin antes dejar a buen recaudo esa nuestra parte inmaculada en un rincón estanco de nuestro alma. Desde allí habría asistido —a veces con horror— al infamante espectáculo de cómo éramos capaces de traicionarnos, de cómo nos vendíamos, de cómo nos arrodillábamos, de cómo claudicábamos de nuestro ser por más o menos suculentos platos de lentejas.

.....Con suerte, un día, esa parte de nosotros arrumbada en el alma, aprovechando un momento de desengaño y decepción, saldrá de su exilio y se presentará ante nuestra conciencia, investida de blancura, enarbolando, aún frescas, las ilusiones dejadas atrás aquel desgraciado día en que elegimos dejar de ser el que éramos para ser el que los demás esperaban que fuésemos... y reclamará su tiempo y su espacio, su oportunidad. Dependerá del grado alcanzado de podredumbre el que podamos, entonces, recuperar el tiempo no vivido, dar un giro a nuestra vida y, en una suerte de renacimiento, vivir, en ésta, otra existencia, una vida renovada, postergada. Pero claro, como todo tiene su momento preciso, su instante apropiado, este intentar vivir lo que no se vivió desde una existencia desengañada no es lo mismo que vivir lo que toca cuando toca, de forma natural.

.....Los prejuicios y los postjuicios serán formidables impedimentos, barreras que se alzarán, por momentos, infranqueables. Por eso digo que, dependiendo del grado de podredumbre que nos afecte, seremos o no capaces de llevar a cabo ese supremo acto de regeneración. Un estado avanzado de corrupción impediría cualquier intento en ese sentido, no quedando sino el insuficiente consuelo de la ensoñación o... la locura. De todos modos nunca sería un camino fácil, pues deberíamos desintoxicarnos a fondo, con lo que ello implica de sacrificio, cuando no de verdadero martirologio. No es sencillo reconocerse como un estúpido, cuando se creía haber actuado como triunfador (triunfador para un mundo en que el triunfo está ligado al éxito aparente en el medrar y no a la autenticidad, a la veracidad, o a la honestidad en el ser).

.....El desnudamiento, en este trance, es imprescindible; y es duro quedarse desnudo ante todas las miradas, y además hacerlo sin bajar la mirada, antes bien, mirando a los ojos a quienes nos verán como locos o desnortados. No gustará ese mostrarnos orgullosamente desnudos, se nos achacará desvergüenza y aun obscenidad. Habrá quien sienta bochorno; quien, capaz de empatía, sienta cómo esa su pura parte arrumbada se le estremecerá en el alma, y serán éstos los que bajen la mirada. Pero la mayoría nos apedreará, nos tratará de expulsar de sus vidas, como a verdaderos apestados (¡apestados de pureza!), intentando por todos los medios a su alcance evitar que seamos ejemplo para los jóvenes (esos que, aún puros, puedan, llegado el momento de la encrucijada, elegir equivocadamente, seducidos y animados por nuestra rebelde actitud).

.....La gente no suele perdonar a quien es capaz de morir y renacer en vida (salvo a quien han de erigir en Dios, a quien no sólo perdonan sino que lo elevan a los altares; de todas formas, lo ubican fuera de este mundo). La gente común sólo suele tener una vida, y si alguien se atreve a mostrarles que es capaz de vivir más de una —sin salir de esta— lo tacharán de endemoniado, de blasfemo, y lo zaherirán, lo desterrarán o lo enterrarán bajo una lluvia de aguzadas piedras de incomprensión e intolerancia, y después colocarán una pesada losa de convencionalismo encima. Aún así, si ese momento llega, si acaece el instante en que habremos de morir —el que fuimos a nuestro pesar— para renacer —el que seremos a nuestro placer—, valdrá la pena exponerse a todos los peligros, pues los afrontaremos sin traicionarnos, jugándonos el que somos, y no el que, de forma espúrea, representamos o padecemos.

50 años de música

1965-2015

........En el principio fue Sigma 6, un grupo heterogéneo en individualidades pero homogéneo en su procedencia: la Regent Street Polythecnich, en Cambridge, donde todos estudiaban arquitectura. Corría el año 1964. Roger Waters —que a la sazón tenía veinte años— sería el factótum; alrededor: Richard Wight, Nick Mason y otros tres o cuatro más que al cabo de año y medio dejarían la banda. Sigma 6 derivaría en The Abdabs, primero, y The Screaming Abdabs y The Arquitectural Abdabs, después. En 1966, al trío formado por Water, Wright y Mason, se le unió un tal Syd Barrett, un espíritu artístico de primer orden. Waters lo reconoció enseguida, supo que era lo que les faltaba para terminar de consolidar el grupo que pretendía. Fue de Barret la idea de cambiar el nombre al grupo, un día que debían tocar en una velada junto a otros que detentaban el mismo nombre que entonces tenía la banda (T-Set o Tea Set). Aficionado al blues, de cuya música partía su inspiración, fusionó los nombres de dos de sus modelos bluseros: Pink Anderson y Floyd Council; fue así como surgió el embrión: The Pink Floyd Sound, al que pronto se le caería el Sound, quedando simplemente The Pink Floyd, hasta 1968, en que perdió el The, quedando un más sonoro y pegadizo Pink Floyd.

.....Syd Barrett, por su talento poético y afán experimentador se convertiría en el compositor principal del grupo, además del guitarrista y vocalista. Waters pasó al bajo; Wrigth se encargó de los teclados y Mason al manejo de las baquetas. El éxito en los ambientes underground fue inmediato. Los directos eran míticos, cargados de energía y psicodelia (era el tiempo en que Revolver, el célebre álbum de The Beatles, vio la luz). Syd Barrett obligaba al grupo a autoexigirse al límite, su capacidad de improvisación era proverbial, pero, a veces, sus compañeros se las veían y se las deseaban para seguirlo. Les golpeó el éxito de manera imprevista: en poco más de un año su fama se había extendido por toda Europa, sus sencillos se vendían como rosquillas en los ambientes juveniles más innovadores y menos convencionales.

.....Syd fue víctima de su propio genio. Como les ocurre a tantos, su propia problemática personal se alió a una fama que exigía cada vez más. Comenzó a coquetear con las drogas, sobre todo aquellas con un efecto más directo e intenso sobre al creatividad: los alucinógenos y los psicotrópicos, entre ellos el LSD (no fue el único, a Jim Morrison, Jimmi Hendrix, Janis Joplin y otros muchos, les ocurriría otro tanto). Su creatividad se comportaba como un tiro de caballos desbocados; al grupo les costaba cada vez más seguirlo. Comenzaron a tener problemas en los directos. Esto, en pleno éxito, pero sin consolidar aún, no lo podían permitir los restantes miembros del grupo.

.....Llegó un momento en que tuvieron que elegir. Waters llamó a otro amigo, David Gilmour, que había enseñado a tocar la guitarra al mismo Barrett. Al principio acudió a él para que sirviera de apoyo, por si Barrett se quedaba colgado en medio de un concierto (cosa que no era rara les sucediese en aquellos momentos). Pudieron grabar su primer álbum, The Piper at the Gates of Dawn, que les consagraría como la banda underground del momento. Su sonido, basado en el blues, se expandía y retorcía, buscaba y rebuscaba, ascendía y se precipitaba, para volver de nuevo a ascender y dilatarse de manera extravagante, bien en forma de melódica balada, bien en sincopado punteo de guitarra; comenzaron a recrear sonidos de la naturaleza o de la vida cotidiana por medio de samplers y experimentación sonora nunca antes acometida.

.....Barret explotó, o, mejor, implosionó. Llegó un momento en que se quedaba catatónico, colgado de su misma idea improvisada, sin capacidad para regresar. El grupo lo tuvo claro. Con dolor tuvieron que prescindir de él. David Gilmour se hizo cargo de la guitarra. Así, quedó conformado el grupo definitivamente, con los cuatro miembros que lo harían celebérrimo. Barrett iniciaría una carrera en solitario que más se parecería a una montaña rusa. Su talento seguía ahí, pero desequilibrado, sin asidero, puro impulso dionisíaco, sin el necesario contrapeso apolíneo. Pink Floyd, en cambio, se equilibró, siguió su ascenso hacia la cumbre con grandes dosis de profesionalidad, determinación y buen hacer, aunque sin la extraña magia que aportaba Barret. Hay quien dice que el mejor Pink Floyd acabó cuando se fue Syd. Pero lo que es cierto es que el Pink Floyd que se convertiría en un fenómeno de masas, con más de 300 millones de álbumes vendidos, sería el que, desde aquel primer Astronomy Domine que abría el primer álbum (el antes citado The Piper at the Gates of Dawn), alcanzaría la gloria imperecedera con Echoes (del álbum Meddle), hasta llegar al galáctico éxito de The Dark Side of the Moon y Wish You Were Here. Tras éste un combativo y reivindicativo Animals y un más contestatario y metafísico The Wall (con espléndida adaptación fílmica como colofón). Por entonces Roger Waters se había convertido en el compositor casi único del grupo. Con regularidad bianual, estos cuatro álbumes verían la luz entre 1973 y 1979.

.....Tras El Muro surgirían las primeras desavenencias. The Final Cut, en 1983, pretendió ser el epitafio del cuarteto (Waters, Gilmour, Wright, Mason), el final pactado. Waters se fue, pero los que quedaron se resistieron a disolver Pink Floyd; el resultado fue un irregular lapsus mental: A Momentary Lapse of Reason (1987), impugnado a la distancia por Waters, sin resultado. Hubo litigio por el nombre del grupo. Ganaron Gilmour, Wrigth y Mason. Poco después Wright también tuvo problemas, salió del ya terceto, aunque regresaría unos años después. En 1994 acometerían la realización de un nuevo álbum, The Division Bell, en el que quisieron recuperar el clima y el estilo de Wish you Were Here, cosa que en cierto modo lograron, aunque sin conseguir alcanzar la calidad del ya mítico trabajo de 1975. En 2008 Richard Wright moría. Aquellos que soñaron con una reedición de Pink Floyd, los cuatro de nuevo juntos, se quedarían ya definitivamente sin sueño.

.....Este año, 2014, este mismo mes, Noviembre, un nuevo álbum verá la luz, en cierto modo como homenaje al mítico teclista del grupo, el título lo dice todo: The Endless River, la portada del disco no es menos elocuente: una barca discurre por un lecho de nubes hacia lo que parece un ocaso o un amanecer; al remo, de pie y de espaldas, un hombre que recuerda vagamente la silueta de Wright.

...

.....Dos serán los posts dedicados a Pink Floyd, a su discografía, a sus álbumes de estudio: 14 fueron, si no contamos el aún por salir. Se dividirán, pues, en dos. En este primer post los siete primeros, a los que he añadido un álbum compilatorio, Relics (1971), por albergar varios temas que no aparecen en ningún otro álbum. Estos siete primeros son: The Piper at the Gates of Dawn (1967), A Saucerful of Secrets (1968), Music from the Film More (1968), Ummagumma (1969), Atom Heart Mother (1970), Meddle (1971) y Obscured by Clouds (banda sonora que sería del film la Vallée, de Barbet Schroeder) (1972), en vísperas de uno de los discos más míticos de la historia de la música moderna. Con él se abrirá el segundo post: The Dark Side of the Moon (1973), Wish You Were Here (1975), Animals (1977), The Wall (1979), The Final Cut (1983), A Momentary Lapse of Reason (1987) y The Division Bell (1994). Además, como curiosidad, añado el próximo The Endless River, que aparecerá el próximo 10 de noviembre (2014).

.....Aquí se ofrecerán, junto a los archivos sonoros correspondientes (versiones remasterizadas y digitalizadas de los vinilos originales, de las que, en alguno de los álbumes, se ofrecen dos versiones: "sonido LP" y "sonido mejorado"), las carátulas originales (tanto la frontal como la trasera, y, en su caso, el encarte interior) y los tracklisting de cada álbum, con el timing correspondiente al archivo que se adjunta; además, en cada tema, cuando es vocal, hay un hipervínculo (enlace) que conduce a la letra de la canción (los temas que no posean hipervínculo son, pues, instrumentales —obvio).

.o.O.o.

DISCOGRAFÍA
1
1967-1972

THE PIPER AT THE GATES OF DAWN

5 de Agosto de 1967

TRACK LISTING

1. Astronomy Domine: 00:00
2. Lucifer Sam: 04:12
3. Matilda Mother: 07:20
4. Flaming: 10:28
5. Pow R. Toc H.: 13:14
6. Take Up Thy Stethoscope And Walk: 17:40
7. Interstellar Overdrive: 20:47
8. The Gnome: 30:27
9. Chapter 24: 32:41
10. The Scarecrow: 36:24
11. Bike: 38:35

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Versión Original (Sonido LP)

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Versión Original (Sonido mejorado)

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THE PIPER AT THE GATES OF DAWN
DELUXE EDITION ALBUM
Disc Three

TRACK LISTING

1. Arnold Layne: 00:00

2. Candy and a Currant Bun: 02:55

3. See Emily Play: 05:41

4. Apples and Oranges: 08:35

5. Paint Box: 11:40

6. Interstellar Overdrive (Take 2) (French Edit): 15:26

7. Apples and Oranges (Stereo Version): 20:42

8. Matilda Mother (Alternative Version): 23:53

9. Interstellar Overdrive (Take 6): 27:02

A SAUCERFUL OF SECRETS
29 de Junio de 1968

TRACK LISTING

1. Let There Be More Light: 00:00

2. Remember a Day: 05:36

3. Set the Controls for the Heart of the Sun: 10:10

4. Corporal Clegg: 15:38

5. A Saucerful of Secrets: 19:51

6. See-saw: 31:48

7. Jugband Blues: 36:25

MUSIC FOR THE FILM MORE
27 de Julio de 1969

TRACK LISTING.

1. Cirrus Minor: 00:00

2. The Nile Song: 05:18

3. Crying Song: 08:45

4. Up the Khyber: 12:18

5. Green is the Colour: 14:31

6. Cymbaline: 17:30

7. Party Sequence: 22:20

8. Main Theme: 23:27

9. Ibiza Bar: 28:55

10. More Blues: 32:15

11. Quicksilver: 34:27

12. A Spanish Piece: 41:41

13. Dramatic Theme: 42:46

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UMMAGUMMA
25 de Octubre de 1969

TRACK LISTING CD 1 (LIVE).

1. Astronomy Domine: 00:00
2. Careful With That Axe, Eugene: 08:32
3. Set The Controls For The Heart Of The Sun: 17:22
4. A Saucerful Of Secrets: 26:49

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TRACK LISTING CD 2 (STUDIO)..

1. Sysyphus Part One: 00:00

2. Sysyphus Part Two: 01:09
3. Sysyphus Part Three: 04:39
4. Sysyphus Part Four: 06:29
5. Grantchester Meadows: 13:29
6. Several Species Of Small Furry - Animals Gathered Together

In A - Cave And Gr...: 20:56
7. The Narrow Way Part One: 25:55
8. The Narrow Way Part Two: 29:23
9. The Narrow Way Part Three: 32:17
10. The Grand Vizier's Garden Party Part One – Entrance: 38:14
11. The Grand Vizier's Garden Party Part Two – Entertainment: 39:14
12. The Grand Vizier's Garden Party Part Three – Exit: 46:20

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ATOM HEART MOTHER
10 de Octubre de 1970

TRACK LISTING,

1. Atom Heart Mother: 00:00

2. If: 23:42

3. Summer '68: 28:13

4. Fat Old Sun: 33:42

5. Alan's Psychedelic Breakfast: 39:05

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Versión Original (sonido LP)

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Versión Original (sonido mejorado)

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MEDDLE
30 de Octubre de 1971

TRACK LISTING

1. One Of These Days: 00:00

2. A Pillow Of Winds: 05:55
3. Fearless: 11:08
4. San Tropez: 17:16
5. Seamus: 20:59
6. Echoes: 23:14

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Versión Original (sonido LP)

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Versión Original (sonido mejorado)

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OBSCURED BY CLOUDS
3 de Junio de 1972

TRACK LISTING

1. Obscured by Clouds: 00:00
2. When You're In: 03:05
3. Burning Bridges: 05:36
4. The Gold It's In The...: 09:06
5. Wot's... Uh the Deal: 12:14
6. Mudmen: 17:23
7. Childhood's End: 21:41
8. Free Four: 26:14
9. Stay: 30:31
10. Absolutely Curtains: 34:39