ALMA-TADEMA, PINTOR ARQUEOLÓGICO
.....Que Alma-Tadema fue un enamorado de lo clásico a nadie le cabe duda: su obra rezuma efervescencia clasicista. Que ese enamoramiento supuso, además, un interés y una atención casi científica por recrear aquellos ámbitos históricos es fácil de constatar a poco que se mire con la misma atención e interés su obra. Que la plasmación de ese interés y esa atención se ha hecho con tan pasmosa fidelidad que uno parece asistir a imágenes fotográficas de aquel mundo, una especie de realidad virtual holográfica que de repente se condensa ante nuestros asombrados ojos, es, también, constatable y contrastable. Escenógrafo de la historia (no sólo de la clásica greco-romana, también de la egipcia, de algunos pasajes de los albores de la Edad Media e, incluso, de la sociedad contemporánea decimonónica), nos la presenta con todo lujo de detalles. Tanto se identificó con aquellas épocas pretéritas que su propia residencia estaba colmada de mármoles, de esculturas, de mobiliario y de todo tipo de artilugios de aquellos tiempos.
.....En el anterior post, en la Presentación de la actual propuesta que allí se hacía, ya se avanzó que el cine le debe la escenografía de algunas de sus más lujosas superproducciones históricas (añado aquí, a las que allí se hacían referencia, a la Cleopatra, de Joseph L. Mankiewicz, estrenada en 1963, con Elizabeth Taylor y Richard Burton en los papeles de la última faraona de Egipto y el rebelde triunviro Marco Antonio —por cierto, y aunque no venga al caso, film que supuso un fiasco comercial y artístico). Y eso es decir mucho sobre la solvencia recreativa de Alma-Tadema a la hora de abordar escenarios tan paradigmáticos. Uno contempla algunas de las más grandiosas recreaciones del pintor británico-neerlandés, como Spring (1894), The Roses of Helliogabalus (1888) o la más "discreta" The Vintage Festival (1871), y, la verdad sea dicha, poco se deja en ellas a la imaginación. Hay tal detallismo en la recreación, tal el grado de fidelidad a la imagen que en nuestra mente uno ha fijado tras leer los textos de los contemporáneos, o de visitar no más sea las ruinas de lo que en un tiempo fueran aquellas civilizaciones sofisticadas e influyentes, que se concluye aceptando tales recreaciones como verosímiles instantáneas de una época evocadora y siempre admirable.
.....No creo que sea nada difícil comprobar este extremo si tomamos como referencia la película antes citada, y la ponemos en relación con The Meeting of Antony and Cleopatra 41 BC (1883) y The finding of Moses (1904). Obviamente, la grandilocuencia del grandioso —y fallido— peplum de Mankiewicz demandaba el exceso de lo pomposo y lo rimbombante; pero no es descabellado establecer paralelismos o descubrir pistas en el desmesurado desfile de Cleopatra fílmico que conducen a la obra de Alma-Tadema.
.....Pintor enciclopédico, escenógrafo arqueológico, en sus cuadros volcó todo el erudito conocimiento que a lo largo de su vida recabó de la Grecia y, sobre todo, de la Roma clásica. Conicimineto adquirido no sólo en multitud de textos, archivos y visitas al Museo Británico (o al Louvre francés), sino cimentado en las inspecciones oculares que llevaría a cabo en sucesivos viajes a Italia: el primero en 1863, con motivo del viaje de bodas de su (primer) matrimonio con Pauline Gressin Dumoulin, en el que visitó Florencia, Roma, Nápoles y Pompeya; el segundo en 1872, esta vez con su segunda y definitiva esposa, Laura Epps; en el tercero, realizado en 1876, abriría estudio en Roma; y en 1883 realizaría su cuarto y último viaje a Roma y especialmente a Pompeya. Sus críticos más feroces le afearon esta tendencia a plasmar tanto detalle como llegó a conocer de aquella extraordinaria cultura, tildando sus obras de catálogos museísticos más que de expresiones pictóricas. Pero, críticas a parte, lo cierto es que es de agradecer una tal minuciosidad y honestidad histórica, cimentada en una gran capacidad de trabajo y una auto exigencia elevada.
.....Si hay dos tipos de cuadros: los que imitan más o menos fielmente la realidad, intentando completar lo aparente con lo subyacente —lo emocional—, que el genio y la sensibilidad del artista puede sentir y reproducir; y aquellos que expresan una realidad nueva, transmutada o al margen de la aparente, que en ocasiones difiere diametralmente de la convencional (casi todas las expresiones artísticas del siglo XX, derivadas del impresionismo decimonónico son de este tipo: postimpresionismo, fauvismo, cubismo, surrealismo, etc.). Es decir, la pintura que reproduce lo real y la que lo inventa —o lo refunda. La pintura de Alma-Tadema, obvio es, pertenece a la primera categoría: recrea la realidad, aunque se trate de una realidad ya finiquitada, ya que, por clásica, permanece en actualidad permanente, gracias, entre otras manifestaciones artísticas, a la recreación que de la misma realiza —entre otros— el pintor neerlandés. Esa minuciosidad fue la que le granjeó el éxito profesional de una época, la victoriana, en que la imitación de lo clásico era casi un deber, y más entre las élites pudientes e ilustradas (las élites artísticas ya empezaban a mirar hacia otro lado, cansadas de tanta imitación de la realidad, agotados ya los cauces de corriente tan recurrente).
.....Las vanguardias trajeron vientos nuevos. Vientos que se llevaron las representaciones clásicas a ese limbo en que se sitúa el exoespacio de lo eterno, más allá de las fronteras de lo visible, pero que de cuya existencia no cabe dudar (como no dudamos de que en el firmamento existan miles de millones de galaxias, con sus miles de millones de estrellas, con sus miles de millones de planetas). Ese "despeje" del interés artístico para hacer sitio a las nuevas formas de expresión trajeron como consecuencia una desvalorización de toda representación más o menos académica o realista. No eran tiempos para la arqueología —es decir, para el pasado— sino para la prospectiva —es decir, para el futuro—; como resultado de este movimiento pendular pintores como Alma-Tadema ( o como John William Godward) fueron arrinconados hasta casi desaparecer. Minusvalorados por el zeitgeist (el espíritu del tiempo) los pintores academicistas como Alma-Tadema se depreciaron hasta límites ridículos (si sus obras, en vida, en el cénit de su popularidad, se cotizaban entre 3.000 y 4.000 libras esterlinas —alcanzando alguna hasta las 10.000 £—, en los años veinte, en plena decadencia del arte victoriano, apenas alcanzaban unos cientos).
.....Habría que esperar a la década de los años 60 del siglo XX para ver revalorizarse otra vez la obra del pintor. Tomando como referencia una de sus obras más carismáticas, The Finding of Moses (1904), mientras que a su finalización el primer comprador había pagado por ella 5.250 libras esterlinas, las ventas posteriores fueron: 861 £ en 1935, 265 £ en 1942 y 252 £ en 1960. Pero cuando el mismo cuadro se subastó en Christie's, en Nueva York, en 1995, alcanzó la cifra de 1,75 millones de £. Y cuando volvió a subastarse, esta vez en Sotheby's, en 2010, también en Nueva York, estableció un nuevo récord para una pintura del artista y de la época victoriana: 35.922.500 $. Posteriormente, en 2011, Sotheby's sacó al mercado otra de sus emblemáticas obras, The Meeting of Anthony and Cleopatra, 41 BC, adjudicándose por 29,2 millones de $. Alma-Tadema volvía a estar así en la cima de la cotización pictórica más de un siglo después.
.....Hay valores que son intemporales, que alcanzan el estatus de clásicos por ser intrínsecos y consustanciales a una manera de interpretar o recrear el mundo. Alma-Tadema, como pintor enciclopédico, por pintor arqueológico, ha adquirido dicho estatus. Poco importa si su estilo es inactual, si su perspectiva es dócil a la recreación realista de un pasado ejemplar en tantas cosas (y no sólo por ser cuna de la civilización occidental), en su ámbito es un modelo, su influencia en la cultura posterior ha sido patente, hacia él se mira cuando se pretende buscar una referencia ambiental de la Grecia o la Roma clásicas. Él consigue más —y más rápidamente—, en relación a la recreación escenográfica de aquel tiempo, con una de sus escenas cotidianas (la entrada al teatro, el mercado de flores, las ofrendas a los dioses, los simposios o la siesta) que cualquier relato latino de la época. Su meticulosidad y esmero, su escrupulosa prolijidad obran el prodigio de revivir visualmente lo ya desaparecido. Y eso es un valor inextinguible.
Homenaje Poético a Alma-Tadema
De color con sabias manchas
el pintor trastoca el tiempo:
hace presente el pasado
en la dimensión del lienzo.
Vara mágica el pincel,
al conjuro del talento,
hace brotar las imágenes
de los clásicos veneros.
¡Ved cómo Grecia florece!,
¡cómo de Roma el renuevo
prospera sobre la tela!,
cultivados por el genio.
¡Con cuánta fidelidad
se nos muestra lo pretérito,
con cuánto detalle lo ido
aparece como vuelto!
¡Qué veracidad transmite
el cuidadoso diseño;
la diestra composición,
cuánto de verdadero!
Los hechos acaecidos
detenidos en el gesto;
presente y perenne ya,
eternizado, el momento.
GALERÍA
Sir Lawrence Alma-Tadema
(1836-1912)
EL MUNDO CLÁSICO: GRECIA Y ROMA
3. DE DIOSES Y DE HOMBRES
Sir Lawrence Alma-Tadema - A dedication to bacchus, 1889
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Sir Lawrence Alma-Tadema - A dedication to bacchus, 1889
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Sir Lawrence Alma-Tadema - A Spring Festival (On the Road to the Temple), 1879
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Sir Lawrence Alma-Tadema - La siesta (Escena pompeyana), 1868
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Escenas de referencia para La Siesta
Sympósion (συμπόσιον)
Cerámica de Figuras Rojas, Grecia
Pintor de Cuma A, Crátera de figuras rojas con escena de banquete, h. 340-330 a.C.
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Roses of Helliogabalus, 1888_detail 9
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Women of Amphissa, 1887
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Vespasian hearing from one of his generals
of the taking of Jerusalem by Titus the dispatch
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Education of the Children of Clovis, 1868
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Cleopatra
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Egyptian chess players, 1865
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Egyptian chess players, 1865
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Egyptian In His Doorway, 1865
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Egyptian juggler
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Joseph overseer of pharaoh's graneries, 1874
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Joseph overseer of pharaoh's graneries, 1874
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Pastime in Ancient Egypt, 1864
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Sir Lawrence Alma-Tadema - Pastime in Ancient Egypt, 1864
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The death of Pharaohs first-born son, 1872
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The death of Pharaohs first-born son, 1872
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Death of the Pharaoh’s Firstborn Son, 1872 (Rijksmuseum)
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Egyptian Widow, 1872 (Rijksmuseum)
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Egyptian Widow, 1872
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 1
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 2
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 3
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 4
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 5
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 6
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The finding of Moses, 1904_detail 7
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Meeting of Antony and Cleopatra 41 BC, 1883
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Sir Lawrence Alma-Tadema - The Meeting of Antony and Cleopatra 41 BC, 1883
NATIONAL PORTRAIT GALLERY
Retratos e imágenes en que figura Alma-Tadema, conservados
en el prestigioso archivo fotográfico británico
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Marston, Searle and Rivington; woodburytype, published 1881
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Marston, Searle and Rivington; woodburytype, published 1881 (2)
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albumen carte-de-visite, circa 1877
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albumen cabinet card, circa 1877 (2)
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albumen carte-de-visite, circa 1877 (3)
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bromide print on paper mount, circa 1877
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photogravure, (1888 or before)
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carbon print, published November 1888
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albumen print, circa 1888
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Searle and Rivington, after Frank Dudman, for Joseph Parkin Mayall; photogravure, circa 1883
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published by Virtue & Co; photogravure, 1900s
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bromide postcard print, 1905
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photogravure, published 1895
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cigarette card, 1890-1894, published circa 1894-1907
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published by Claus & Schweder; soap packet card, circa 1877; published after 1887
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published by Félix Potin; cigarette card, circa 1877; published after 1893
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published 1902-1907
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woodburytype, published 1881
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Sir Lawrence Alma-Tadema - NPG_by Flora Lion; pencil, 1912
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published in Vanity Fair 22 March 1879
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wood engraving, published 14 July 1888
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Line engraving and etching, 1883 or after
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black crayon, white and grey paint on paper, circa 1895
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